sábado, 3 de diciembre de 2016

EL HOSPITAL

Pasaron dos horas hasta que subimos a la habitación, esas dos horas solas con mi pequeño y con V, fueron las mas felices de mi vida, no recuerdo otro momento mas feliz en mi vida, bueno si, cuando nacio Lucca. Julen se engancho al pecho pronto y nos miraba, nos buscanba, lloraba…tan pequeño y no entendia porque ahora tenia que esforzarse por comer si hace un momento tenia de mama a demanda lo que quería. 4 kilazos de niño y sin todavía leche hicieron que le bajase un poco el azúcar, asi que le tuvimos que dar un biberón nada mas llegar a maternidad.
Vino a revisarme la ginecóloga, solo me habían dado 3 puntos, pero tenia un desgarro de nivel dos que no se suturo para que se curase de forma natural, un monton de fisuras que en ese momento colocada de anestesia no me podía imaginar la guerra que me iba a dar. Ahora comparando con la episiotomía de Lucca no se que decir, no se que es mejor…todo da igual de guerra, es una zona sensible.
Como estaba todo bien me subieron a la habitación, 308, la misma habitación donde ingresaron a mi madre por mi nacimiento, la emoción se notaba, todo el mundo estaba encantado de poder ver a Julen y ver que estábamos bien, y que estábamos felices. Lo recuerdo como un momento de conexión con mi madre y mis hermanas , de orgullo y de protección máximos.

Ahora tocaba descansar, recuperarme, regalos, visitas, comer jamon!! Jajaja disfrutar de mi milagrito, llenar de amor mi vida de nuevo, esperar a Lucca a ver que cara ponía, que decía con su hermano…

No hay comentarios:

Publicar un comentario